Podemos definirla como una serie de ejercicios y actividades que nos ayudan a desarrollar las capacidades del bebé. Las áreas del desarrollo que podemos fortalecer son:
· Sensorial
· Motriz
· Cognitiva
· Lenguaje
· Socio-afectiva
Le llamamos “temprana” pues se realiza en los primeros años de vida, desde los 30 días de nacido hasta aproximadamente los 3 años, cuando tu bebé tendrá la edad suficiente para entrar al kínder y realizar otras actividades que ayuden a su crecimiento y desarrollo.
Debemos aprovechar este momento pues el niño tiene una mayor plasticidad y crecimiento cerebral, además en esta etapa se adquieren las destrezas y habilidades.
La Estimulación Temprana comprende actividades como: juegos, ejercicios físicos y canciones, que debemos realizar de forma atractiva y repetitiva.
El objetivo es el desarrollo completo de tu bebé y de todas sus capacidades, creando niños más seguros, sanos y felices, pues las actividades las realizará en tu compañía y en muchos casos con ambos padres, esto nos ayuda a crear vínculos afectivos que le permitirán desarrollarse mejor en la vida adulta.
Es común pensar que sólo se trata de juegos, sin embargo, son actividades pensadas especialmente para fortalecer áreas específicas del desarrollo. Para hacer más atractivo el aprendizaje el niño y los padres deben realizarlas como un juego. Los ejercicios deben ser cortos, repetitivos, variados y si es posible acompañarlos con una canción que puedan recordar fácilmente.
La atención de un niño es breve y debemos aprovecharla al máximo realizando actividades que tengan más de un beneficio, es por eso que las clases se complementan con música.
Se recomienda que tomes una clase por semana con tu bebé pero es necesario reforzar lo aprendido en clase. En casa podrás realizar los ejercicios y actividades para darle continuidad y ayudarle a crear un ambiente más estructurado que fomente su sano desarrollo. Lo importante es recordar que tu bebé necesita de estímulos que le proporcionen aprendizaje, distracción, retos y vínculos afectivos. Los bebés no sólo duermen y comen, al igual que nosotros gozan de tener actividades, reír, crear, experimentar y sentir la aprobación de sus padres. Es muy importante brindarle este tipo de espacios que le permitan conocer el mundo a tu lado.
Durante el primer año de vida la estimulación temprana se divide en periodos de dos meses, por ejemplo: de 0 a 2, 6 a 8, etc. Y después del año cada seis meses, ejemplo: de 1 a 1.5, 3 a 3.5, etc.
Cada grupo deberá tener un área de desarrollo específica para su edad.
Los primeros meses de vida nos concentraremos en ejercicios para el fortalecimiento de cuello, logrando el control cefálico, posteriormente girar solos y en la siguiente etapa comenzará a sentarse manteniendo el equilibrio. Casi a la mitad del año llegará el arrastre y gateo, acercándonos a los 12 meses tu bebé comenzará la marcha.
El equilibrio será fundamental para el desarrollo motriz de tu bebé y lo podemos estimular de varias formas dependiendo su edad.
Te recomiendo iniciar las actividades con un calentamiento. Este debe de ser de cabeza a pies.
Cada parte del cuerpo deberá realizar dos ejercicios, por ejemplo:
Cabeza: Hacer movimientos de SI y NO.
Hombros: Subir y bajar; adelante y atrás .
Brazos: Flexionar y extensión; Amasar los brazos de axila a manos.
Muñecas: Círculos dentro y fuera.
Dedos manos: Amasar cada uno de ellos comenzando con el pulgar.
Piernas: flexión, extensión; Bicicletas.
Pies: Círculos dentro y fuera.
Dedos de los pies: Amasar cada uno de ellos comenzando con el pulgar.
Puedes comenzar con 5 repeticiones e ir aumentando hasta llegar a 10 repeticiones por sesión.
Terminado el calentamiento puedes continuar con una actividad central:
De 0 a 2 meses:
Poner al bebé boca abajo y mover una sonaja de izquierda a derecha y de arriba abajo, la intensión es que tu bebé cada día sostenga mejor su cabeza y logre moverla cada vez que tu realizas el estímulo auditivo.
De 2 a 4 meses:
Poner a tu bebé boca arriba sobre una cobija, jala la cobija de un extremo como si fueras a tapar a tu bebe, casi girándolo por completo, hazlo por ambos lados (izquierda y derecha) y después de repetirlo dos veces de cada lado gíralo por completo hasta dejarlo boca abajo.
De 6 a 8 meses:
Sentado sobre una pelota (Puede ser de Pilates 65cm aprox.) dar rebotes rápidos y lentos, te puedes ayudar de una canción que tenga ritmos diferentes.
De 8 a 10 meses:
Poner al bebé boca abajo sobre una pelota y hacer movimientos de derecha a izquierda y de adelante hacia atrás, moviendo la pelota. Recuerda sostener firmemente a tu bebé para evitar accidentes.
De 10 a 12 meses:
Necesitaras una caja de cartón resistente, donde tu bebé entre sentado pero quede el suficiente espacio para que pueda mantener el equilibrio. Sienta a tu bebé dentro de la caja, mueve la caja como si estuviera dentro de un automóvil, puedes ofrecerle un aro que simule el volante de un auto. Tu bebé deberá mantener el equilibrio mientras tu mueves la caja y el sostiene el aro.
Recuerda que cada ejercicio requiere de tu supervisión, un espacio adecuado , agradable y un ambiente seguro.
Además de fomentar el desarrollo psicomotriz de tu bebé, las estimulación temprana, puede lograr que pases un momento agradable en familia, conozcas juegos que podrás realizar en casa y establezcas actividades programadas con un orden y secuencia. Esto le permitirá a tu hijo formar la capacidad de crear hábitos y a ti establecer límites claros.
También es importante recordar que saturar la semana de tu bebé no lo hará más listo o más feliz, los bebés al igual que nosotros necesitan descansar y mantener un equilibrio entre actividades recreativas, educativas y de reposo.
Dar a tu bebé una educación completa dependerá no sólo de la cantidad de actividades, sino también de la constancia y variedad de las mismas.
Una crianza integral incluye una alimentación adecuada, actividad física, actividades educativas, musicales y sobre todo los vínculos afectivos creados en su hogar.